viernes, 29 de septiembre de 2017

Docente de la Unach investiga el movimiento indígena de Chimborazo

Mgs. Carlos Larrea, docente de Comunicación Social
de la Universidad Nacional de Chimborazo
Perfil del Investigador
Carlos Alberto Larrea Naranjo, docente de Comunicación Social de la Universidad Nacional de Chimborazo, nació en Ambato, el 1 de agosto de 1967. Estudió en la escuela 5 de Junio de Riobamba y la secundaria en el colegio Santo Tomás Apóstol.
Tiene título universitario en Comunicación Social, por la Universidad de Guayaquil y una Maestría en Administración de Empresas. Se encuentra cursando la Maestría en Periodismo de Investigación y Minería de Datos en la Universidad de La Rioja.

Correo: carloslarrea@unach.edu.ec

En la Universidad de La Habana (Cuba), ha iniciado sus estudios doctorales en Comunicación Social, desarrollando una propuesta de investigación acerca del movimiento indígena de Chimborazo, sobre el cual conversamos.

¿Cuál es el objetivo de su trabajo doctoral?
Consideramos dos escenarios, que tiene relación con el rescate de la memoria histórica de un movimiento social, por tradición excluido; y, el segundo elemento es poner en el debate actual, desde la comunicación, el movimiento histórico de los indígenas en Chimborazo, como evento significativo de Ecuador y América.

¿Cuáles son los alcances de la investigación?
Tenemos claro que en la formación doctoral podemos establecer determinados objetivos, construir una serie de hipótesis, pero el momento de iniciar la investigación no sabemos hasta dónde puede llegar el alcance real y efectivo. Nosotros queremos comprender qué sucede en la parte comunicativa, política y organizativa en los movimientos que vamos a estudiar y contribuir con los elementos cognitivos en el desarrollo de los sectores históricamente relegados.

¿Cuáles son los alcances de la investigación?
Hemos tenido la oportunidad de participar en investigaciones previas, de los cuales hemos escrito algunos artículos científicos y nos encontramos con una población que ha respondido al status quo, que se ha acostumbrado al eurocentrismo en su proceder, que ha aceptado una serie de elementos occidentales, provocando que permanezcan en un ostracismo social. Dentro de esta realidad, encontramos a personajes del movimiento indígena que no quieren recordar el pasado, que no aceptan su pasado; y, a nosotros nos interesa muchísimo profundizar en estos elementos porque, al menos desde el período de estudios que inicia en la década de los noventa, a propósito de un levantamiento indígena de resistencia, considerado como un modelo de renovación social de los indígenas ecuatorianos, es importante conocer cómo han funcionado sus relaciones internas y sus formas de comunicación.

Usted desarrolla su trabajo investigativo desde la epistemología del sur, ¿Qué características tiene esta orientación científica?
Las epistemologías del sur son el reclamo natural que los sectores oprimidos, colonizados, realizan cuando despiertan y reclaman. Las epistemologías del sur son la antítesis de la concentración del conocimiento y el poder en Europa y el norte, incluidos los Estados Unidos. Pero no se trata de una cuestión geográfica, sino geopolítica.

¿Quiere decir que estos sectores construyen una visión propia de lo que es la política, la sociedad, la economía y la comunicación?
Sí, y la ecología. Todo ello nos permite identificar una serie de variables y reconocer en el camino los elementos constitutivos de este fenómeno social en Chimborazo.

¿Cuál es la diferencia entre tener una concepción científico filosófica desde el sur y otra eurocéntrica?
Podemos identificarla y evidenciarla en una cuestión sustancial, que sería el reconocimiento de la cultura, política, ecología e histórica de los pueblos indígenas, mediante el estudio a profundidad de sus características, desde la visión de los actores. Si usted ve, en Europa y Estados Unidos, determinadas tendencias, corrientes, pensamientos y teorías universales para la humanidad, porque se han validado en el tiempo. Esto no sucede en nuestra realidad, no se reconoce la sabiduría ancestral, las formas organizativas, el pensamiento andino.

Sin embargo, es también cierto que en Ecuador y América Latina somos herederos de Europa, por lo tanto, ¿no deberíamos tener esa visión occidental?
Por supuesto, pero el estudio lo que intenta es analizar otra perspectiva que puede enriquecer nuestro propio conocimiento. Por ejemplo, analizar el desarrollo de la Teología de la Liberación y su influencia en el movimiento indígena de Chimborazo, que tiene un componente histórico, cultural, sociológico y religioso muy particular, con la influencia de Monseñor Leonidas Proaño, que debe ser comprendido desde una lógica andina.

¿Qué elementos investigarán sobre esta influencia religiosa?
Proaño influyó en la formación doctrinaria religiosa, política y comunicacional, haciendo uso del Evangelio para pregonar la libertad total de las personas, sin discrimen ni segregación. Entonces, es importante entenderlo en sus orígenes y los avances que ese sector ha conseguido en el tiempo.

Investigación de la Unach analiza la historia de la carrera de Diseño Gráfico

Mgs. Santiago Barriga, docente de Diseño Gráfico
de la Universidad Nacional de Chimborazo
Perfil del Investigador
Santiago Fabián Barriga Fray, docente investigador de la Universidad Nacional de Chimborazo, nació en Guayaquil, el 22 de octubre de 1982. Realizó la primaria en la escuela Alfredo Pareja Diezcanseco de Guayaquil y la segundaria en los colegios Edmundo Chiriboga y Juan de Velasco.
Se tituló como Licenciado en Diseño Gráfico en la Unach y tiene dos posgrados en Desarrollo de la Inteligencia y Educación; y, otro Master en Diseño y Branding.


Correo: sbarriga@unach.edu.ec

Ha terminado sus estudios de Doctorado en Diseño por la Universidad de Palermo y se encuentra elaborando su tesis investigativa, sobre la enseñanza y la didáctica de las disciplinas proyectuales.

¿Cuáles son los intereses de conocer los elementos epistemológicos del Diseño Gráfico como enseñanza?
Tratamos de recopilar todo el bagaje histórico que dio origen a nuestra carrera, por lo que el título de mi investigación doctoral es “Institucionalización de la carrera de Diseño Gráfico en la Universidad Nacional de Chimborazo, en el período 2002 – 2015”, desarrollando esta etapa, primero por conocer la situación que dio lugar a esta carrera, analizar el contexto que influenció en su creación, en especial las prácticas publicitarias que inspiran los planes de estudio, que se origina en el arte impreso y las mallas curriculares fueron influenciadas por esta praxis.

¿Cómo abordan el estudio de la planificación curricular?
Queremos analizar si los planes de estudio han estado a la par de la evolución de la sociedad y el mercado, para verificar si existen contenidos que pueden ser obsoletos.

¿La investigación se relaciona con el rediseño curricular de la carrera?
Hice el corte de la investigación al 2015, debido a que a partir de allí la carrera entra en proceso de rediseño. A partir de este proceso de reforma curricular se tomaron otras posturas que inicialmente no se realizaron, como estudiar el contexto social. Hicimos una investigación para conocer la pertinencia de la carrera de Diseño Gráfico, para lo cual se incluyeron nuevas asignaturas y se eliminaron otras. Este nuevo rediseño nos ayudará a acercar la carrera al sector productivo.

¿Qué elementos importantes pretende alcanzar del estudio de la carrera, en el período 2002 – 2015?
Hasta el momento, en el avance de la investigación, lo que he podido obtener es la obsolescencia de parte del currículo. A pesar de que la universidad tiene un modelo pedagógico que se puso en práctica desde el año 2007, no ha llegado a influir en los contenidos de algunas asignaturas, lo que le resta competitividad.
Los planes de estudio y los contenidos de la carrera de Diseño Gráfico son el resultado de la visión particular del docente que dirige cada asignatura, lo que se soluciona con el nuevo rediseño curricular, porque se cambia totalmente la forma de planificar los contenidos, trabajando en proyectos integradores de saberes.
Así, a pesar del modelo pedagógico de la universidad y del convenio de La Sorbona y de Bolonia, donde se compromete a generar una nueva educación universitaria, se manejó currículos tradicionales, bajo posturas pedagógicas conductistas.

¿Es decir, que convive el modelo conductista dentro del modelo constructivista?
Hace un par de meses se realizó una capacitación acerca del modelo pedagógico actual de la universidad, donde se debatió sobre la existencia de vestigios de esas prácticas por el simple hecho de manejar contenidos y es responsabilidad del claustro docente actualizar cada uno de esos planes de estudio.

Sin embargo, no toda práctica conductista es mala, ¿No sería mejor generar una simbiosis adecuada entre constructivismo, pensamiento complejo y lo bueno que tenga el conductismo?
En nuestra carrera que tiene grandes componentes prácticos, técnicos, debamos aplicar determinados procesos conductistas, especialmente en el manejo de las herramientas tecnológicas, sin convertirse en la regla de la educación que ofrecemos. Pero, si nos vamos a un plano superior, es preciso brindarles las herramientas teóricas antes que las técnicas. Por ejemplo, nosotros les decimos a los estudiantes que el software es una extensión de ustedes, no tiene que ser el requisito para ejercer la profesión. Tienen que profundizar en sus conocimientos teóricos y metodológicos para usar un programa y cristalizar determinado proyecto.

¿Quiere decir que los proyectos de Diseño Gráfico se construyen intelectualmente?
Exactamente, el proyecto se genera a nivel cognitivo, pero trato de ubicarme en el rol del estudiante, que está ávido por el manejo de software antes que por los conocimientos científicos. Es un paradigma que debemos tratar de romper, para que los futuros profesionales comprendan que antes deben aprender metodologías.


jueves, 28 de septiembre de 2017

Unach trabaja en la creación de sistemas de gestión turística

Mgs. Ramón Rodríguez, docente de Gestión Turística y Hotelera,
de la Universidad Nacional de Chimborazo
Perfil del Investigador
Ramón Antonio Rodríguez Piña, es un profesional cubano, nacido el 12 de noviembre de 1960. Tiene un título de pregrado en Ingeniería Industrial, dos maestrías: en Consultoría Gerencial y en Inteligencia de Negocios.


Correo: rarodriguez@unach.edu.ec

En el momento actual, está doctorándose en su país natal y ejerce la docencia en la carrera de Gestión Turística y Hotelera, de la Universidad Nacional de Chimborazo, trabajando en el marco de la sostenibilidad turística, desde la visión empresarial y apelando a las herramientas y tecnologías de la Ingeniería Industrial y de la Ingeniería Ambiental.

¿En qué proyectos de investigación trabaja como docente de la Unach?
Estoy desarrollando tres proyectos. Una primera investigación sobre las buenas prácticas en turismo y hotelería; segundo, sobre un sistema de información turístico, como un proyecto macro para aplicarlo en todo el Ecuador; y, el tercero, que es mi tesis doctoral, trata de la creación de una tecnología para la gestión ambiental integral en empresas extrahoteleras ecoturísticas.

Por sus áreas de formación, ¿sus investigaciones tienen un importante agregado multidisciplinario?
El concepto es incluir lo intra e interdisciplinar y todo ello trae consigo que se fundan las diferentes disciplinas en modelos y tecnologías, capaces de replicarse y generalizarse en todo el país.

¿Quiénes participan en sus tres proyectos?
Ante todo los alumnos, que son los protagonistas principales. Es inconcebible que en proyectos de investigación de una universidad no existan estudiantes, en su concepción. Pero también colaboran maestrantes y doctores, así como el Departamento de Turismo del GADM de Riobamba.

Hablando del proyecto sobre buenas prácticas, ¿cuál es su objetivo?
Las buenas prácticas, no es más que lograr un nivel estándar de calidad, en base a las normas ISO 9001-2015, que logre que estas prácticas se generalicen y el turista que visite la provincia de Chimborazo vea que existe una homogeneidad en el tratamiento que recibe.

En el diagnóstico de esta investigación, ¿Qué elementos descubrieron?
El diagnóstico situacional ha sido real y crudo, porque tenemos muchas personas emprendedoras, con gentileza y carisma; otras que poseen habilidades empíricas. No tenemos una homogeneidad en cuanto a la calidad del servicio, en cada uno de los cantones de Chimborazo. Significa entonces, que debemos lograr un nivel tal donde no existan diferencias de la “servucción”, para que los clientes perciban valores agregados en su ocio y descanso.

¿Esta homogeneidad implicaría un cambio cultural de los operadores turísticos?
Ante todo, el turismo no se lo puede mirar desde el punto de vista pragmático, de ganar dinero. Es un fenómeno social, donde la comunicación, el concepto de valores agregados está en la calidad del servicio que se brinda, que no espera el turista. Hay que recordar que cada viaje y “repitencia” del turista crea lazos afectivos, relaciones intrapersonales. Así se genera una socialización, un criterio, una imagen del destino.  

¿Significa que la mejor publicidad está en el cliente satisfecho?
Hacen falta relacionistas públicos, especialistas en comunicación, pero realmente es el propio actor, gestor del turismo el que proyecta la imagen y la verdadera publicidad de su negocio.

¿Cuál es la relación con el sistema de información turístico?
Este sistema no es más que, a partir de bases de datos, asociados a la infraestructura turística, sean capaces de gestionarse. Cuando digo gestión, me refiero a la planeación, acción, control, retroalimentación de todos aquellos aspectos del turismo que merecen ser monitoreados para mantener la calidad en el servicio y sobre todo una gestión del conocimiento.

¿De dónde recopilan la información?
Existe cierta data que se puede obtener a partir del gobierno, pero cuando se trabaja en la localidad, existen datos que nos están evidenciados, entonces hay que generar una base de datos capaz de contener lo que interesa localmente para la toma de decisiones y para las reorientaciones estratégicas.

¿Qué harán con los datos?
Este instrumento no es para que se quede en la universidad, sino para difundir la información a través de la Dirección Provincial de Turismo y ser capaz de que cada uno de los GAD municipales tenga acceso a los datos procesados y en tiempo real podamos tomar decisiones. Todos los gestores turísticos podrán tener acceso, pero realmente el sistema está dirigido a la toma de decisiones de los departamentos provinciales de turismo.

¿Cuál ha sido la reacción de los operadores de turismo de este trabajo realizado por la universidad, con fines de mejorar la calidad?

Hay un grupo de actores que se sienten entusiasmados, otros que se sienten escépticos y otros que simplemente no les interesa. Esto depende del grado cultural que poseen de la necesidad que tengan por estar en las redes turísticas, porque hay muchos dueños de negocios que consideran que no es necesario realizar alianzas estratégicas, que no hay porqué incursionar en otros campos. Una de nuestras tareas consiste en abrirles la mente, el cambio de pensamiento, para que miren la necesidad de que juntos, unidos y cooperando, somos capaces de elevar la competitividad y lograr una mejor cartera de clientes.


Arquitectura de la Unach trabaja en la recuperación del Teatro León

Desde el mes de mayo de 2017, los estudiantes de la carrera de Arquitectura, de la Universidad Nacional de Chimborazo (Unach), realizan prácticas preprofesionales, involucrados en los trabajos de recuperación del Teatro León, un importante bien cultural del cantón, como apoyo a la Dirección de Patrimonio del GADM de Riobamba.

Arq. Héctor Cepeda, asesor de prácticas preprofesionales de Arquitectura,
asesora la GADM de Riobamba en la recuperación del Teatro León
El Arq. Héctor Cepeda, docente y tutor de prácticas de Arquitectura, señala que la carrera busca dar un aporte a la ciudad, siendo parte del proyecto de recuperación del este ícono arquitectónico, construido entre 1920 y 1930 por el escritor y terrateniente Arturo León, quien realizó la obra para impulsar la cultura en Riobamba “y nosotros debemos continuar con este ejemplo, recuperando este hito en el cual se presentaron grandes artistas de ópera, música ecuatoriana, danza y teatro”.

Para del catedrático, “la importancia del bien patrimonial radica en sus antecedentes históricos, como hito e inclusive tiene un premio en 1930, cuando fue reconocido como ornato de la ciudad, como mejor edificio. Forma parte de la trama urbana como un elemento arquitectónico relevante, que debemos como riobambeños proteger y ponerle en funcionamiento”.

El equipo de trabajo encargado del proyecto es la Dirección de Patrimonio, con sus técnicos y los estudiantes de séptimo y octavo semestre, con su docente asesor, quienes tiene como objetivo la restauración total del edificio, que implica la seguridad estructural, debido a la edad del bien. Para ello, nuestros estudiantes realizarán mediciones, verificarán el estado y fallas visibles y ocultas. Posteriormente, el municipio intervendrá en el reforzamiento de la estructura y la reparación de otros elementos.

La carrera de Arquitectura cuenta con un escáner 3D, sobre el cual informa el Arq. Cepeda que “los docentes Luis Velasteguí, María Banga y Nelson Muy se están capacitando para manejar este equipo y utilizarlo en el modelamiento del Teatro León, lo que permitirá obtener una radiografía del edificio y detectar que fallas tiene, con el fin de recuperarlo.

El profesor, manifiesta que el trabajo de la universidad es necesario, para afinar el estudio de regeneración urbana que ya tiene el GADM de Riobamba, para que el momento que inicie la obra no existan “novedades técnicas ni económicas que paralicen el proyecto una vez iniciado”.


Investigador de la Unach desarrolla herramientas digitales en Comunicación

Mgs. Ramiro Ruales, docente de Comunicación Social,
de la Universidad Nacional de Chimborazo
Perfil del Investigador
Ramiro Geovanny Ruales Parreño, nace en Riobamba, el 6 de enero de 1973. Cursó sus estudios de primaria en la escuela Dr. Arnaldo Merino y la secundaria el colegio San Felipe Neri. Es Técnico y Tecnólogo en Análisis y Programación de Sistemas e Ingeniero de Sistemas Informáticos.
Estudió la Maestría en Comunicación Corporativa en la Universidad Regional Autónoma de los Andes y está culminando la Maestría en Redes Sociales en la Universidad Internacional de la Rioja (España).


Correo: rruales@unach.edu.ec

En los actuales momentos, es docente de la carrera de Comunicación Social de la Universidad Nacional de Chimborazo y ha iniciado el proceso de estudios doctorales en la Universidad de La Habana, siguiendo una línea de investigación sobre el manejo de herramientas digitales en la formación de los estudiantes de su especialidad.

¿Desde cuándo trabaja en esta línea investigativa?
Ha sido bastante interesante, que tiene mucho tiempo, pues fui docente de la asignatura de TIC y Multimedia, que ha evolucionado con el rediseño curricular, de ser una materia de herramientas tecnológicas a constituir un apoyo en su formación profesional, no solo en el ámbito del Periodismo, sino que se han abordado una serie de elementos y estructuras académicas.

¿Qué aspectos técnicos contiene el trabajo curricular desarrollado?
Desde Argentina, la comunicadora y formadora Sandra Crucianelli, ha sido fundamental en el diseño del microcurrículo, conjuntamente con Ramón Salaverría, que es uno de los pensadores icónicos en el área, expertos en Periodismo de Datos, Periodismo Digital y herramientas tecnológicas. Con su asesoramiento, hemos planteado nuevas visiones y concepciones, teóricas y prácticas para la asignatura, permiten una formación con un plus profesional, cohesionando la tecnología con la Comunicación Organizacional, la Planificación de la Comunicación, con Géneros Periodísticos, con Técnicas de Guion, etc.

¿Dentro de la investigación sobre herramientas digitales, qué resultados ha obtenido?
Los resultados han sido plasmados en la tesis de la Maestría que estoy concluyendo en la UNIR, que será publicada. Uno de los principales es el cambio de concepción cognitiva, actitudinal y procedimental de los estudiantes. Aprovechando las herramientas para crear, por ejemplo, líneas de productos comunicacionales digitales, creando estrategias para el uso de estos productos, generando planificación estratégica en el ámbito digital para las organizaciones, sean de comunicación u otras.

¿Quiénes participaron en la investigación?
Tuve la oportunidad de investigar a la población estudiantil de séptimo y octavo semestres, grupo en el cual se evidencian cambios radicales, desde el uso de programas alternativos y gratuitos, respetando los derechos de propiedad intelectual, vigentes en Ecuador; además, se mejora el uso de las redes sociales, que ya no constituyente solamente un espacio de entretenimiento sino plataformas de trabajo comunicacional. Durante la medición para comprobar resultados, la distancia entre un primer momento y el actual es profundo.

¿En la misma línea de trabajo, realiza la investigación con fines de estudios doctorales?
Sí, tengo algunos insumos que me han permitido valorar los procesos actitudinales de los estudiantes y que van a ser utilizados para futuras investigaciones, recordemos que este trabajo tiene cerca de cuatro años, donde los datos me permitieron mirar la evolución académica.

¿Qué tópico tratará en su investigación doctoral?
Voy a realizar un manual de gestión para el uso de herramientas digitales para los comunicadores sociales, que trabajan en los ámbitos periodísticos y de comunicación organizacional. El objetivo de este proyecto es concienciar a las instituciones, incluidos los comunicadores, que es necesario aplicar técnicas, procedimientos, actividades y respuesta a sus usuarios y clientes, en función de sus planificaciones estratégicas particulares.

¿Uno de los elementos clave de un manual como el que usted plantea es evitar o responder ante crisis institucionales?
Desde luego, dialogando con Hilda Saladrigas, nuestra directora de posgrado, llegamos a la conclusión de que, en las organizaciones modernas, el Community Manager maneja la comunicación digital a su libre albedrío, no solo en América Latina sino en todo el mundo, por lo que planteamos un manual de gestión, para encontrar el equilibrio entre lo que se debe comunicar, cómo y hacia dónde hacerlo, tres aspectos que deben ser considerados en cada proceso informativo, de forma sistemática y estructurada.

¿El conocimiento y aplicación de este manual, permitiría crear una cultura comunicacional en las instituciones?
Sí, abordamos el tema en dos aristas, desde el ámbito académico, formando comunicadores que manejen estas herramientas conceptuales y técnicas. Desde lo profesional, no puedes comenzar a planificar si no conoces la realidad social y organizacional, aclarando todo el proceso como una planificación global.

¿Cuál es el impacto personal de sus estudios informáticos y comunicacionales?
Me ha permitido crecer profesionalmente, comprendiendo los alcances del Periodismo Digital, de las herramientas digitales, es un mundo fascinante, uno aprende a diario, considero que la formación que tengo en las áreas informática y de la comunicación se complementan y enriquecen.


miércoles, 27 de septiembre de 2017

Unach organizará cursos de capacitación en lenguaje de señas

Perfil de la Investigadora
María Nella Barba Tellez, nace en Guaimaro (Camagüey – Cuba), el 8 de enero de 1960. Cursó sus estudios de primaria y secundaria en su ciudad natal y tiene dos títulos universitarios, en Idiomas por la Universidad de Camagüey y Psicopedagogía en la Universidad de Oriente.
En La Habana estudió una maestría en Educación y el doctorado en Ciencias Pedagógicas. Colabora en universidades ecuatorianas desde 2015 y se encuentra en la Universidad Nacional de Chimborazo, desde abril de 2017.
Ph.D. María Nella Barba, docente investigadora
de la Universidad Nacional de Chimborazo

Correo: mnbarba@unach.edu.ec

Actualmente ha presentado el proyecto de investigación: “El análisis situacional del aprendizaje de la lengua de señas ecuatoriana en personas sordas, intérpretes y oyentes: contribución al diseño de programas de formación online en LSE desde la Unach”, sobre el que dialogamos.

¿Cómo iniciaron su investigación sobre la educación en lenguaje de señas?
Se está planteando, como uno de los programas de política educativa en Ecuador, la atención a la diversidad y sobre esa base realizamos un estudio de campo y nos percatamos de que hay déficit en la formación de lenguaje de señas.

¿Qué metodología utilizarían para enseñar este lenguaje?
La Organización Mundial de Sordos está trabajando en función de capacitar a los docentes en este ámbito, pero no es suficiente, entonces nos preguntamos, cuál es el papel de las universidades y no hemos obtenido respuesta, por lo que nos hemos proyectado a que la Unach sea líder en la impartición de cursos on line en lenguaje de señas.

¿Cuál es el objetivo principal de estos cursos de capacitación?
Vamos a partir de análisis situacional del lenguaje de señas en la provincia de Chimborazo, con el propósito de crear un signabulario digital, contextualizado para la población sorda de Ecuador, para luego diseñar una estrategia, por fases, que nos permita la creación, ejecución y evaluación de estos cursos. El propósito final es ofrecer esta herramienta a los intérpretes, docentes y a toda la población en general, para que toda persona interesada pueda acceder a nuestras capacitaciones y prepararse.

¿Cómo afectaría a los estudiantes universitarios esta oportunidad académica inclusiva?
Hemos visto que en la Unach hay estudiantes que tienen esa capacidad especial, sin embargo, pasan mucho trabajo porque no pueden poner en práctica su cultura comunicativa. Una forma de resolver esta situación es creando estas opciones de formación para toda la población, incluyendo a los profesores de la universidad.

¿Qué actividades han desarrollado para la ejecución de este proyecto?
El proyecto empieza a ejecutarse desde octubre de 2017, ahora estamos en los preparativos entre todos los actores. Es un proyecto que cuenta con la participación de la Universidad de Granada (España) y la Universidad de La Salle (Colombia), que son pioneros en esta experiencia, tienen resultados investigativos importantes y nosotros vamos a aprovechar su experiencia y lo tenemos incorporado en el proyecto como contrapartes, transfiriendo resultados.

¿Qué aspiran ustedes lograr en las personas que se inscriban en los cursos de formación propuestos?
La idea es que toda la población que esté interesada en aprender pueda acceder, para ello vamos a trabajar con el Centro de Educación Continua de la Unach, quienes nos van a apoyar con su infraestructura académica en esta gran empresa, para que los cursos tengan la calidad requerida y puedan ofertarse para la mayor cantidad de aspirantes.

¿Quiénes serán los docentes de estos cursos de formación?
Lo que tenemos pensado es diagnosticar quiénes son los mejores intérpretes en lengua de señas, en la zona de influencia y a ellos les vamos a generar fuentes de empleo para que nos apoyen en todo el proceso y se conviertan en los tutores de los cursos.

¿Van a desarrollar una metodología de formación, a través del lenguaje de señas?
Puede ser una segunda parte del proyecto y resultaría muy interesantes realizar otro tipo de cursos vinculados a determinados profesionales, donde personas con capacidades especiales y todos los interesados puedan acceder a ellos y desarrollarse en el perfil de su profesión.
Otra finalidad que tenemos, es lograr una unidad, una plataforma psicolingüística en la lengua de señas, a nivel latinoamericano, porque ya tenemos estudios previos y más nuestra investigación, nos facultaría el desarrollo de esta área.

¿Podría desarrollarse el lenguaje de señas como un eje transversal en la educación universitaria?
Yo creo que sí y no solamente este lenguaje sino todo lo que tenga que ver con la atención a las necesidades educativas y capacidades especiales.


martes, 26 de septiembre de 2017

Docente de la Unach investiga a Leonidas Proaño en su faceta de comunicador

Julio Bravo Mancero, es docente de Comunicación Social,
de la Universidad Nacional de Chimborazo
Perfil del Investigador
Julio Adolfo Bravo Mancero, nace en Riobamba (Ecuador), el 23 de febrero de 1971. Cursó la primaria en Chunchi, en la escuela Fernando Pons y 5 de Junio; continuó sus estudios en el colegio Juan de Velasco.
Una vez graduado, se vinculó a Escuelas Radiofónicas Populares del Ecuador, manteniéndose en el ámbito de la comunicación. Trabajando en diario La Prensa y Los Andes, en Ecuavisión y otras emisoras de radio.
Tiene título de Licenciado en Comunicación Social por la Universidad Nacional de Chimborazo, tiene un diplomado superior en Edición de Medios Impresos, especialista en Imagen Corporativa y magister en Comunicación Corporativa. Estudia el doctorado en Comunicación e Información Contemporánea, en Universidad Santiago de Compostela (España).

Artículos y ponencias de Julio Bravo en Google Académico

Correo: jbravo@unach.edu.ec

Su tesis doctoral trata sobre el discurso periodístico y religioso de Monseñor Leonidas Proaño, como un personaje referente en Ecuador y América Latina, sobre la cual nos informa en una interesante entrevista que recorre los abruptos caminos socio-políticos del obispado de Riobamba.

¿De dónde surge esta inquietud por conocer el ámbito comunicacional de Monseñor Leonidas Proaño?
Pienso que la universidad ecuatoriana tiene un déficit con el estudio de muchos intelectuales y pensadores nacionales, como Monseñor Leonidas Proaño. Si bien se le ha estudiado desde el tema religioso y educativo, desde lo comunicacional no se lo ha abordado. Se conoce la faceta de la Teología de la Liberación o la educación liberadora, pero a Proaño hay que estudiarlo desde la Comunicación liberadora.

¿Cuál es la influencia de Leonidas Proaño en la sociedad?
Tengo una hipótesis que estoy en proceso de investigación: todo lo que Proaño hizo desde lo comunicacional, fue el punto de partida para que otros autores, a nivel internacional, escribieran, como la Escuela Latinoamericana de Comunicación, la interacción y mediaciones de Barbero, el estudio de los discursos y mensaje de Prieto, entre otros.

¿Qué objetivos se ha planteado para el desarrollo de la tesis doctoral?
Identificar el nivel discursivo, desde lo periodístico – religioso de Monseñor Leonidas Proaño, una investigación de tipo cualitativo, observación participante, entrevista a profundidad, técnicas que me permitirán descubrir si el tipo de comunicación de Proaño era liberadora o no.

¿Qué cualidades comunicativas observa usted en el Obispo?
Para ser un buen comunicador hay que ser un buen escucha y Monseñor Proaño pasaba días completos escuchando a la gente, desarrollando lo que fue su trilogía: ver, juzgar y actuar. Desde este pensamiento se ve escuchando la voz del otro; juzgar para comprender la realidad del pobre, del marginado y actuar como punto culminante para transformar esa realidad.

En la época convulsionada que vivió Leonidas Proaño, ¿cómo fue la comunicación que desarrolló para acercarse a los indígenas y también a toda la sociedad?
Primero debía ser aceptado en las comunidades indígenas y Proaño logró la admisión del pueblo, desde la humildad, hablando su mismo idioma y como él decía: devolverle la luz a quien no la tenía, reconociendo al campesino indígena como ser humano, algo muy difícil para su época. Esto generó rechazo en los poderosos, en los hacendados, en la Iglesia conservadora, porque la primera acción que tomó Proaño fue parcelar las tierras de la Iglesia y se las entregó a quienes las trabajaban.

¿Cómo influyó Leonidas Proaño en los sectores progresistas de Chimborazo?
Cuando Proaño encuentra una realidad calamitosa del sector indígena y que la Iglesia no estaba cumpliendo su cometido en el plano evangelizador, formó sacerdotes comprometidos, además formó misioneros indígenas y las comunidades eclesiales de base.

¿Ejerció el periodismo el “Obispo de los indios”?
Sí, recordemos que él creó el diario “La Verdad” de Ibarra, del cual escribió el primer editorial. Después creó Escuelas Radiofónicas Populares del Ecuador (ERPE), porque necesitaba, desde la educación, cambiar la mentalidad de la gente, evangelizar y alfabetizar. Fue una iniciativa tomada de radio Sutatenza de Colombia. El proyecto fue financiado con recursos internacionales, gracias a sus relaciones e influencia en Latinoamérica.

Una vez que inicia el trabajo de ERPE, ¿Leonidas Proaño tuvo su propio programa de radio?
Tenía al menos dos programas de radio, uno de ellos se llamó “Hoy y mañana”, donde un comunicador daba lectura a las cartas que recibía el Obispo y él tenía la prolijidad para responder todas ellas, por lo que se puede considerar a Proaño como un visionario de la comunicación directa con la gente.

¿Escribía, también, Leonidas Proaño?
Claro, tiene al menos una decena de libros, como poesía, reflexionó sobre la Teología de la Liberación, sobre la educación liberadora y ando tras los pasos de documentos que permitan conocer si escribió sobre comunicación liberadora, que fue aplicada en la práctica.

Como parte de su investigación, usted ha escrito un artículo científico que lo relaciona con otro personaje latinoamericano.
Se llama “Proaño y Lula, la misma historia en geografías diferentes”, que trata de un estudio comparativo de dos realidades. Tanto Proaño, como Lula da Silva, comenzaron desde los estratos bajos, se acercaron a los sectores populares y transformaron esa realidad. Las conclusiones a las que llego en este artículo son las siguientes:
a) Monseñor Proaño formalmente para su gestión de la comunicación salió de la infraestructura de la iglesia y se acercó a las personas al aire libre, mediante la minga social. Lula da Silva dejó los alones y auditorios pata encontrarse con la gente en las plazas y concentraciones públicas.
b) Proaño usó su discurso comunicativo para cambiar la realidad del indígena y Lula hizo lo mismo para mejorar la situación de los trabajadores.
c) Para los dos líderes, lo que importa es la organización como eje de cambio, en un solo colectivo que le dé fuerza.

¿Qué aspira usted de esta investigación doctoral?
Un doctorado cambia la vida del profesional, desde lo personal hasta lo intelectual. En cuanto a lo segundo, aspiro a publicar tres libros, desde la Teología de la Liberación, la educación liberadora y principalmente un texto sobre la Comunicación liberadora, demostrando que Proaño la desarrolló, que fue un innovador en esta área, creando una comunicación más humana, donde existe interrelación, intermediación e interacción.
También deseo que la tesis sea sobresaliente, que traspase el continente, que alcance el reconocimiento de la comunidad científica y abra las puertas para un posdoctorado.


Investigación de la Unach desarrolla metodologías para la enseñanza del Diseño Gráfico

Rafael Salguero, docente investigador de Diseño Gráfico,
de la Universidad Nacional de Chimborazo
Perfil del Investigador
José Rafael Salguero Rosero, nace en Puela (Penipe, Chimborazo), el 13 de junio de 1983. Estudió la primaria en la escuela 5 de Junio de Riobamba y se graduó como bachiller en el colegio Carlos Cisneros, en la especialidad de mecánica industrial.
Tiene título de pregrado en Diseño Gráfico, como tecnólogo y licenciado; y, una Maestría en Diseño y Gestión de Marca. Vinculado desde la juventud en los medios de comunicación radiales, también tiene estudios en comunicación social. Actualmente, cursa el doctorado en Ciencias Pedagógicas, de la Universidad “Enrique José Varona”, en La Habana (Cuba).


Como docente de la Unach, es director de la investigación “Prácticas pedagógicas aplicadas en el proceso de enseñanza aprendizaje, en la carrera de Diseño Gráfico, de la Universidad Nacional de Chimborazo”, sobre la cual dialogamos para comprender sus alcances y objetivos.

¿Cómo nació la idea de generar esta investigación?
Fueron dos aspectos importantes que me motivaron, el primero; la participación en un congreso de ciencia pedagógicas en Guayaquil, donde tuve mi primer encuentro con los aspectos formales de la docencia. Después, viajé a Argentina a un congreso de la Universidad de Palermo, que desarrolla una línea de investigación sobre la metodología del diseño.

¿Con qué investigadores trabaja actualmente?
Formalmente me acompaña el compañero Luis Pérez, desde la Didáctica, pero informalmente se han incluido el Arq. William Quevedo, director de la carrera, el Mgs. Jorge Ibarra y la Mgs. Mariela Samaniego.

¿Cuáles son los objetivos que se planteó en el proyecto?
Plantear y diseñar un proceso metodológico para fortalecer las capacidades de la docencia, en los diseñadores gráficos que se dedican a la actividad académica. Los diseñadores tenemos competencias en el área tecnológica profesional, sin embargo, existe un número importante de expertos haciendo docencia, particularmente en la Zona 3, existimos 72 diseñadores gráficos que también somos profesores, con debilidades formativas en el área pedagógica.

¿Qué elementos educativos les hace falta conocer a los diseñadores gráficos?
En nuestro campo de formación del diseño, las áreas profesionales se vinculan al diseño de identidad corporativa, publicitario y persuasivo, diseño web y de productos audiovisuales, entre otros. Pero, en nuestra formación no vimos asignaturas vinculadas a la docencia, como Pedagogía, Didáctica, Filosofía, Sociología o Antropología de la Educación. Las circunstancias nos han llevado a que, como las carreras se están fortaleciendo en Ecuador, los diseñadores formados como tal pasamos a convertirnos en docentes y en este campo profesional nos damos cuenta que tenemos debilidades.

¿Qué prácticas pedagógicas consideran necesarias para los docentes de diseño?
El sistema educativo superior se ha planteado algunas prácticas desde el punto de vista epistemológico, en base a la complejidad sistémica y el conectivismo, ya considerados en el modelo educativo de la Unach, como los aprendizajes significativos y basados en problemas. Por ello, el proyecto apuntó a generar un diagnóstico situacional, para conocer las prácticas pedagógicas que se utilizan y cuáles no y de forma correcta. A partir de allí, modelamos una estrategia para Diseño Gráfico, analizando metodologías y procesos didácticos del diseño industrial y de objetos.

¿Cuál es su población de estudio?
El grupo en el cual aplicamos la investigación, está constituido por los docentes de las carreras de diseño Gráfico de la Zona 3, la Universidad Nacional de Chimborazo y la Espoch en Chimborazo; la UTA y Católica, sede Ambato, en Tungurahua; la Universidad Técnica de Cotopaxi; y, a esta red se añadieron la Universidad Técnica del Norte y la Universidad de Otavalo de Imbabura.

¿Cómo han recibido las personas estudiadas el trabajo?
Existe mucho interés, aunque inicialmente existieron confrontaciones teóricas, discutiendo si el Diseño Gráfico es un oficio, es una actividad profesional o es una disciplina proyectual, una disputa intelectual que se extiende al contexto latinoamericano. La corriente que se está afianzando, a través de las investigaciones doctorales es considerarla una disciplina.

¿Cuáles son los resultados previos que han obtenido?
Los primeros resultados, en la fase diagnóstica, nos han permitido determinar los factores negativos en la experiencia docente; desde el punto de vista pedagógico los profesores acarreamos la herencia conductista de nuestros formadores, de la clase magistral y teórica presentando debilidades en la parte práctica. Otro problema es el desconocimiento de metodologías propias de la profesión. Además, los currículos de las universidades ecuatorianas presentan diferencias significativas, sin tener un tronco común que nos dé identidad como diseñadores.

¿Cuál es su iniciativa para influir en estos problemas y encontrarles solución?
Precisamente, nuestra investigación tuvo la suerte de encontrarse en un momento propicio, porque nos encontramos en los rediseños curriculares. Como un primer logro en este proceso, hemos logrado que en la Zona 3, todas las universidades establezcamos un 80% de similitud en el nivel básico de formación, hemos añadido asignaturas tan importantes como la Semiótica, la Antropología Visual, la Sociología de la Comunicación, en el nivel de profesionalización tenemos un 40% de coincidencia.

¿En cuanto al trabajo metodológico, cómo han avanzado?
Otro de logros, que estamos construyendo ahora mismo, es la adaptación de las metodologías para nuestra profesión. Hemos trabajado tres metodologías:
a) Una adaptación de Bruno Munari, un diseñador industrial, que ha sido evaluada a través de los proyectos integradores de saberes y están validadas.
b) Otra innovación a la metodología de Robert Scott, validada en proyectos integradores de Señalética y en tres proyectos de tesis.
c) Por último, consideramos una metodología para el desarrollo de Tipografía experimental, de Manuel Guerrero para generación de proyectos tipográfico, en el aula y en tesis de grado.

¿Cómo te ha afectado personal y profesionalmente este camino como investigador?
Siento un crecimiento profesional, que me ha permitido debatir con reconocidos diseñadores a nivel internacional, como Norberto Chávez y Jorge Frascara, a quienes entrevisté para esta investigación.