Entrevista con el Ph.D. Víctor Hugo
García, director del proyecto “Reforzamiento de las propiedades
antisísmicas de estructuras”, y docente de la carrera de Ingeniería Civil de la
Universidad Nacional de Chimborazo.
Ph.D. Víctor Hugo García dialoga con su equipo de investigación |
¿Cuál es el origen del proyecto?
El
proyecto se inició con unos trabajos preliminares que tuve la oportunidad de
realizar con algunos docentes de UTPL, donde surgieron varias ideas y de ahí
surgió una problemática particular: los dispositivos que refuerzan las
propiedades de sismoresistencia son usados a nivel mundial en edificios muy
altos, pero resulta que en sitios donde hay suelos blandos, de sedimentos, como en el Ecuador, ya de la experiencia que hubo en el terremoto de México se sabe
que los edificios entre seis y veinte plantas son los más vulnerables a los
movimientos sísmicos.
Los estudiantes que participan en la investigación se preparan para el concurso nacional de hormigón |
Después del terremoto que sufrió
el país en abril, este tipo de estudios tiene mayor relevancia.
Claro,
y yo creo que, aun no ocurriendo esa eventualidad, si usted ve los informes del
Instituto de Geofísica puede ver que Ecuador constantemente se está moviendo;
es más, desde abril de 2016 hasta este fin de semana han ocurrido cerca de 3300 réplicas, sin contar otros movimientos sísmicos que no están estrictamente
relacionados. Entonces vivimos en una zona geográfica llena de fallas y la idea
es prepararse.
¿Cuál es el objetivo de la
investigación?
Se
plantea desarrollar nuevas tecnologías que puedan proveer a la ciudadanía de
dispositivos que sirvan para protección ante estas eventualidades, en este caso
es un dispositivo que se llama “amortiguador de masa sintonizada”, se puede
anexar en el tope de los edificios y puede disminuir sustancialmente su
vulnerabilidad; no es que evite que colapse, es que retrasa el colapso y eso
significa salvar vidas. Una cosa es muy importante, estos aparatos se han usado
a nivel mundial por muchos años, pero nosotros encontramos que, si le anexamos
al dispositivo un elemento fabricado con un material que tenga una respuesta
muy específica, podríamos acoplarlos a los edificios de baja altura. Ya
teóricamente, en las simulaciones se ha demostrado y publicado su utilidad.
Ahora la siguiente fase del proyecto es desarrollar el material y después la
fase de aplicación.
Docentes y estudiantes de Ingeniería Civil trabajando juntos en investigación |
Este proyecto debería trabajarse
con las instituciones del Estado y organizaciones civiles
Indudablemente
que el impacto de un desarrollo científico como este proyecto será a nivel
nacional. Tiene varias dimensiones de relevancia, la dimensión objetiva de uso
para toda la comunidad, pero a nivel académico, dentro de las universidades,
abre la posibilidad para el desarrollo de nuevas áreas de investigación, de
ciencia y tecnología en dispositivos que refuerzan las propiedades
antisísmicas. Conozco algunas facultades de Ingeniería Civil del Ecuador y el
currículo tradicional no contempla el desarrollo de nuevas tecnologías, así que
abrimos una ventana.
¿Se ha realizado algún estudio en
Riobamba, sabiendo que históricamente, en la zona ocurrió uno de los terremotos
más destructivos en la historia del país?
He
leído artículos respecto a la actividad sísmica en Riobamba y tuve la
oportunidad de conocer la trascendencia de ese evento terrible, cual es la
repetibilidad, la frecuencia. También hay algunos estudios de microsismicidad
para hacer una zonificación.
Como
le decía, estos son suelos blandos tuve la oportunidad de estar en una
conferencia en la Unach, donde se explicó que el espesor de la capa de suelo es
de 180 metros de sedimentos, entonces todos los cálculos estructurales que se
hacen deben considerar esta dimensión de suelo blando.
La Unach cuenta con un laboratorio de Ingeniería Civil, donde los estudiantes y docentes realizan sus prácticas académicas e investigativas |
¿Cuál es su equipo de trabajo en
la Universidad?
Estoy
en la carrera de Ingeniería Civil como docente y una vez que se aprobó el
proyecto ingresé como Becario Prometeo. En este momento estoy trabajando con un
grupo de 9 estudiantes, con los cuales vamos al cuarto concurso nacional de
hormigón, que es organizado por el Instituto Americano de Concreto, en
Guayaquil, donde los muchachos tienen que preparar un hormigón con determinadas
características, por lo que los estudiantes no han salido de vacaciones ya que
hemos estado trabajando por varias semanas y estamos listos para representar a
la Unach, frente a los mejores de Ecuador.
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